Novelas ligeras en español

sábado, 8 de julio de 2017

Tsuki ga capitulo 176

–Bienvenido a la Unión Lorel. Estamos honrados por su presencia, héroe Hibiki-sama. –(Sairitz)

Una mujer que está usando una túnica inclina su cabeza respetuosamente mientras ofrece unas palabras de bienvenida hacia su huésped.

Mientras Hibiki agradece a la mujer por sus amables palabras, siente una frialdad en el comportamiento de la mujer.

Es muy débil, y ha desaparecido por completo cuando la mujer dijo sus siguientes palabras, por lo que decidió pasarlo por alto por ahora.

–Bienvenida a tu hogar, Chiya-sama. ¿Sabe que todos han estado anticipando el regreso de la sacerdotisa? –(Sairitz)

–Lo siento, me ha tomado mucho tiempo, Sai. Sólo será por un tiempo, pero he regresado con Onee-chan. Hey, Sai. Hibiki-onee-chan- –(Chiya)

–Chiya-sama, me encantaría escuchar los detalles tranquilamente después. Por ahora, estoy segura de que están cansadas de su largo viaje, así que las llevaremos a las habitaciones en las que se alojarán. –(Sairitz)

La que ha salido al encuentro del héroe, la visitante de Limia, es Sairitz, una de las personas influyentes de Lorel.

La existencia de la sacerdotisa de Lorel es abiertamente conocida por el público, y la gente la adora.

Sairitz tiene un poder significativo, manteniendo una posición en donde gobierna a los que la rodean.

Ella es un representante digna de ser enviada a recibir a visitantes importantes de otros países.

La importancia religiosa de la sacerdotisa hace que la posición de Sairitz sea mucho más influyente de lo que era originalmente.

Ella es “fuerte” en varias maneras que exceden la impresión que Misumi Makoto tiene de ella como una líder poderosa de su país.

Ella mira a sus subordinados, indicándoles que comiencen a dirigir a los invitados. Mientras mira al héroe, la sacerdotisa y sus compañeros se van, ella confirma sus planes con otro subordinado.

–¿Sairitz-sama? ¿Hay algo mal? –

–… Sólo pensé, deseábamos el regreso de la sacerdotisa a nuestro país tan desesperadamente, sin embargo. –(Sairitz)

–La diplomacia empleada por todos, incluido usted misma, Sairitz-sama, está mostrando resultados. –

–… Si ese fuera realmente el caso, me sentiría más feliz. –(Sairitz)

–Sairitz-sama, Chiya-sama ha regresado, así que creo que es mejor no preocuparse tanto. De la misma manera que Limia trató a nuestro país, si hacemos que la sacerdotisa-sama se quede en Lorel de ahora en adelante, eso será- –

–Usted. Si uno sólo piensa en devolver el trato que ha recibido sin tener en cuenta el tiempo y la situación, dará a lugar al peor resultado posible. Asegúrese de grabar esta lección en su mente. Por lo menos, no podremos hacerlo en esta ocasión. Aunque si Chiya-sama es obligada a tomar parte en la guerra, habrán muchas oportunidades. –(Sairitz)

–M-Mis disculpas. He dicho demasiado. –

–También está todo lo que ha ocurrido hasta ahora. No le condeno por sentirse animosa hacia Limia. Pero la realidad es que Chiya-sama apoya fuertemente al héroe desde el fondo de su corazón. Ella vino aquí “por un tiempo” por su propia voluntad. Lo que más me preocupa es… –(Sairitz)

(Ese sería el hecho de que cuando Raidou le pidió a los Caballeros Dragón prolongar su estancia en Rotsgard para ayudar a la restauración de la ciudad, se sentía más como si él estuviera haciendo una demanda. “Tal vez pueda reencontrarse con la sacerdotisa-sama pronto”, eh. A pesar de que Limia y Lorel son consideradas parte de las cuatro grandes potencias, no creo que sean iguales, pero somos un gran país, incluso las medidas diplomáticas no le concederían lo que pidió, aún así obtuvo tan fácilmente lo que quería… Me gustaría que Chiya-sama lo examinara una vez. Me pregunto si debería hacer que pase por Rotsgard en su camino de regreso. Parece que ya se ha dado cuenta de que el héroe Hibiki es una persona sabia, tal vez ella pueda averiguar algo sobre Raidou… Fu, si él pensaba que esas palabras eran sólo para consolarme, que aliviado debe de estar.

–¿Sairitz-sama? –

–… No es nada. Las cosas estarán atareadas a partir de ahora. Voy a depender de usted. –(Sairitz)

–¡Por favor, déjemelo a mí! ¡Serviré a Chiya-sama con todo lo que tengo! –

–Entonces, adelante.– (Sairitz)

Sairitz recuerda a la persona que conoció en Rotsgard no hace mucho tiempo.

Su sugerencia de que los Caballeros Dragón se queden para ayudar con la restauración de la ciudad, y su oferta a cambio.

No hay manera de que una simple compañía tenga el poder de influir en los movimientos del héroe o de la sacerdotisa, y mucho menos de todo un gran país.

Normalmente, ese sería el caso.

Actualmente, la sacerdotisa ha anticipado su regreso a Lorel y trajo al héroe con ella.

Aunque sea temporal, sigue siendo un acontecimiento importante.

Ella no debe concentrar toda su atención en eso.

Aún así.

Sairitz no puede borrar el nombre de Raidou y de la compañía Kuzunoha de su mente.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Yo estaba ahí. (Otro el)

–No eras un hyumano después de todo. –(Makoto)

–Tú, monstruo. –

–No creo que quiera ser llamado así por ti, ya que todavía estás hablando a pesar del gran agujero en tu estómago.– (Makoto)

–¡No debo permitir que te encuentres con Hibiki-sama …! ¡No importa el costo, te detendré aquí…! –

Estoy enfrentando a un tipo con una armadura negra.

Pero está arrodillado y tiene un gran agujero en el estómago, como he dicho.

Por la forma en la que está hablando, creo que probablemente yo lo hice.

Entonces, ¿es este tipo uno de los conocidos de Senpai?

–Un caballero negro, eh. ¿Es esta la supuesta lealtad de un caballero? –(Makoto)

Un caballero negro.

Nunca he oído hablar de ellos.

Pero parece que me conoce.

Miro ese lugar de una manera realmente distraída.

Es como si hubiera un “yo” que está participando, y el otro yo fuera el espectador.

La persona fuertemente herida, que al parecer es un caballero negro, su casco de apariencia sólida se ha roto para revelar la cara de un semi-humano, no un hyumano. No, su rostro es un rostro “arrugado pero suave” que ni siquiera puede ser el de un semi-humano.

–¡Raidou, no importa cómo, voy a detenerte aquí! –(Caballero Negro)

Una gran espada que sería más adecuada para aplastar en lugar de cortar a su objetivo se está dirigiendo hacia mí.

La detengo con mis manos.

Ni siquiera estoy usando mi cuerpo de poder mágico.

Simplemente agarraré la espada con las manos y la detuve.

De ninguna manera, yo no debería ser capaz de hacer algo como eso.

Estaba yendo bastante rápido, ¿o no?

–Hey, ¿sabes lo que es un horno de microondas? –(Makoto)

–¿Microondas …? –(Caballero negro)

–Ajaja, lo siento, lo siento. Olvídalo. Ah si. ¿Podrías decirme tu nombre? Seguramente tu nombre no es “caballero negro” ¿verdad? –(Makoto)

Oigo mi voz que no tiene ningún indicio de tensión en ella.

Hay dos yo; Esta es una sensación extraña.

Los alrededores…

Miro a los alrededores con ansiedad.

Hay escombros dispersos por todas partes, y el aire está lleno de fuego, humo y ruido.

Es un campo de batalla.

–Mi nombre, ¿dices? Fu, ¡kukukuku! ¿Tú no lo sabes? ¡Deberías haber visto a muchos, muchos otros con la misma apariencia desagradable que yo en ese lugar! ¡Y tú los sepultaste a todos! –(Caballero negro)

El caballero negro se señala a sí mismo mientras grita la palabra “desagradable”.

–… No lo sé. No lo recuerdo. Que, ¿tienes algún tipo de rencor contra mí? –(Makoto)

–¡Ciudad Academia! ¡Rotsgard! ¡El festival escolar! ¡¿Vas a decir que has olvidado todo esos, Raidou ?! –(Caballero negro)

–Ah, las variantes, ¿eh? De hecho, eres un poco similar a ellos. ¿Entonces eres una de las variantes que sobrevivieron? Pero sabes, los que se transformaron en ese incidente estaban sufriendo las consecuencias de sus propias acciones de cierta forma, ¿o no? No creo que sea razonable tener rencor contra mi, ¿verdad? –(Makoto)

–Yo soy… –(Caballero negro)

–¿Eh? –(Makoto)

–¡Soy Ilumgand Hoperaise! –(Ilumgand)

¡¿?!

¡¿Ilumgand?!

Eh, pero si lo recuerdo bien, se suponía que había sido asesinado durante el festival escolar por Amelia…

–Ilumgand, eh. El ataque de las variantes en sí es una cosa del pasado, así que realmente no recuerdo nombres individuales. Pero Ilumgand Hopelace, cierto. Lo recuerdo. –(Makoto)

Pero tal vez no recuerdo su nombre; Mientras me enfrento a Ilumgand, no parezco tener una reacción particularmente fuerte.

Me pregunto qué es esta mala sensación que tengo.

–Tú, ¡¿hasta qué punto tienes pensado burlarte de la gente que tienes en frente…?! – (Ilumgand)

–A pesar de ser ridículamente duro, parece que no puedes arreglar ese agujero en tú estómago, por lo que este es el final del show. Me aseguraré de terminar bien contigo. Ahora no queda nadie en el equipo de Senpai a excepción de esa sacerdotisa, y aunque soy torpe, finalmente puedo ponerla en jaque mate. –(Makoto)

¿Jaque mate?

¿El equipo de Senpai?

¿Qué clase de situación es esta?

A pesar de la rareza de estas circunstancias, el yo que está parado allí no pregunta nada mientras extiende su mano izquierda hacia el caballero negro.

–¡¿Me dirías de antemano que tenías la intención de acabarme?! –(Ilumgand)

Ilumgand patea la tierra mientras trata de escapar de la palma que está llegando hacia él.

Pero regresa a su posición original, como si chocara contra algo, y tropieza.

¿Es eso una barrera?

Pero su rango no incluye mis alrededores.

Parece que ha sido creada para actuar como una pared que incluye a Ilumgand solamente.

¿¡Qué es eso, no es eso injusto?!

¡Una barrera que no tiene al lanzador en su centro, que es una habilidad super-maligna, ¿sabes?!

–Volviendo a mi tema anterior, el horno de microondas. Es una herramienta usada para calentar la comida. –(Makoto)

–¿Por qué? … ¡¿Cómo alguien como tú puede poseer tanto poder?! ¡Alguien como tú, que no tiene fe! –(Ilumgand)

–Al principio, pensé “wow, el interior del horno se pone muy caliente…”, ¿sabes? Pero eso no es lo que pasa. Estas cosas como ondas causan diminutas vibraciones en lo que hay dentro, ¿o algo así? Es una tecnología bastante sorprendente. –(Makoto)

Ah, he oído algo como eso antes.

Hace que las moléculas vibren, ¿era así?

A pesar de que es un electrodoméstico familiar y conveniente, recuerdo haberme sorprendido de que sea una cosa tan complicada.

Aunque es sólo un vago recuerdo de haber visto esta explicación en la televisión o algo así.

¿Pero qué es lo que estoy pensando, diciendo tales cosas en otro mundo, a un enemigo, no menos?

Mientras pienso esa pregunta, dice algo extraño.

–Entonces, ¿qué crees que pasaría si le hicieras eso a una persona? –(Makoto)

–… No sé lo que estás tratando de decir. ¿Estás tratando de decirme que quieres quemarme hasta la muerte? –(Ilumgand)

–Eso es lo que asumirías que pasaría, ¿verdad? O es eso, o pensarías que sería algo como ser hervido hasta la muerte. Pero eso no es correcto. Es como ser desintegrado a través de algo como la magia, pero no hay necesidad de lidiar con un cadáver después. –(Makoto)

Algo como magia, ¿eh?

Se refiere a la barrera, supongo.

Aún así.

Hey, hey.

¿Qué pasaría si pusieras a alguien en un microondas?

Qué manera vulgar de matar a alguien.

Nunca lo había imaginado antes.

–… Asegúrate de recordar esto. Definitivamente recibirás tu castigo. Hibiki-sama o la diosa-sama te castigarán definitivamente. El mundo nunca te reconocerá. –(Ilumgand)

–Estaría feliz por eso. Si vinieran contra mí, me ahorrarían muchos problemas. Bueno, entonces, adiós. –(Makoto)

–¡Ilum-kun! –

Increíblemente, la voz de una mujer que llama el nombre de Ilumgand viene con una sincronización perfecta.

–Ah, Hibiki-senpai. –(Makoto)

La dueña de la voz es Senpai.

Digo el nombre de Senpai como si nada hubiera pasado.

Una persona se hincha y estalla.

Explotó como un globo que estalló, con armadura y todo.

El interior de la barrera hemisférica e invisible que rodeaba a Ilumgand queda pintada de rojo y negro.

Ugh.

–Microondas. –

Definitivamente no pensé que eso es lo que quería decir.

¿Qué he hecho?

Imaginar que hay tal manera de que una persona muera.

El hemisferio rojo desaparece rápidamente y todo lo que queda es una gran mancha roja en el suelo.

Es difícil creer que alguien acaba de morir allí.

No hay ningún cadáver, ni siquiera un solo fragmento de carne.

–¡Misumi-kun, tú …!– (Hibiki)

–¡Cómo te atreves a hacerle eso a Ilum-san! –(Chiya)

Senpai y la joven sacerdotisa vieron esta visión tan pronto como llegaron aquí, y ahora me están mirando.

Con ojos llenos de ira y odio.

No puedo culparlas, ya que acaban de ver a uno de sus compañeros morir delante de sus ojos.

Pero ¿era Ilumgand un aliado de Senpai conocido como el caballero negro?

No sólo eso, pero creo que el odio hacia mí en los ojos de las dos claramente no es algo que acaba de nacer de este evento.

No hay señales de sorpresa o confusión; empezaron a mirarme con odio y furia de inmediato, lo que significa que desde el principio …

Espera, ¡no puede ser!

Mi cara está apuntando ligeramente hacia abajo, y mi boca se retuerce visiblemente en una sonrisa.

Estoy impactado.

Estás bromeando, ¿verdad?

¡¿Por qué estoy haciendo tal cosa?!

¡¿Qué están haciendo Tomoe, Mio y Shiki?!

No hay emoción en mis ojos.

Sólo los extremos de mi boca están apuntados hacia arriba en una sonrisa.

Cuando levanto mi cara, mi mano izquierda apunta hacia Senpai y la sacerdotisa.

Hey, para.

Por favor ¿puedes detenerte?

–Parece que llegaste tarde. Terminaré rápidamente, y luego la diosa es la siguiente. Creo que ni siquiera será doloroso. –(Makoto)

¡DETENTE!

–Te he juzgado completamente mal. Es demasiado tarde para que me diera cuenta de esto ahora, cuando no hay vuelta atrás, así que realmente no me queda otra opción. –(Hibiki)

–Bueno, eso es vida. Ah, Senpai. –(Makoto)

No estoy mostrando ninguna señal de sed de sangre para nada.

Pero entiendo lo que significan las acciones de mi futuro yo.

¡No jodas conmigo!

¡¿Por qué le haría eso a Senpai?!

–La forma en que funciona un horno de microondas es. –(Makoto)

–¡PARAAAA! –(Makoto)

Jaah, Jaah.

Me toma un tiempo darme cuenta de que esta respiración irregular es mía.

Cuando toco mi frente, una gran cantidad de sudor fluye de ella.

Puedo sentir la sensación húmeda. Puedo sentir que es sudor frío.

Detengo mi respiración superficial por ahora y tomo un largo y profundo respiro.

Exhalo lentamente.

–Un sueño, eh. –(Makoto)

Esto es Asora, mi dormitorio.

Esto no es un campo de batalla y Senpai no está aquí.

Fue un sueño.

–… Fue un sueño, ¿verdad? –(Makoto)

Para un sueño tan loco fue extrañamente real que me cuestionaba inconscientemente.

Se supone que Ilumgand ha muerto.

Y nadie parecido a un caballero negro ha aparecido alrededor del héroe de Limia o de la familia Hopelace.

Si estamos hablando de un caballero que protege a Senpai, creo que había otro en su equipo.

Uno de los caballeros del reino.

Ni siquiera estoy de humor para volver a dormir.

Estoy completamente despierto.

Tch, aunque la cena con el takoyaki y el tako-shabu fue un gran éxito y todo el mundo lo disfrutó.

Incluso Shiki apretó las manos con admiración, preguntándose en voz alta cuán profundos eran los misterios de los nabe.

Me reí de eso. A pesar de que estaba bastante borracho, era realmente muy divertido.

–Jaja. –(Makoto)

Dejé escapar una pequeña risa mientras recuerdo ese agradable evento.

Después de todo, fue sólo un sueño.

No tiene sentido preocuparse por ello.

… Ah sí.

–Es un poco temprano, pero supongo que practicaré con el arco. Quiero tranquilizarme un poco de todos modos. –(Makoto)

Me cambio la ropa.

Preparo mi arco y salgo de la habitación.

Me dirijo al blanco del tiro con arco que había construido en los jardines.

Hasta que salga el sol de la mañana.

Disparo mi arco, libre de pensamientos obstructivos.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Capitulo anterior                                                                         Capitulo siguiente

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Busqueda por fecha